Autor/a: Won-Pyung Sohn.
Editorial: Planeta (Temas de hoy).
Páginas: 256.
Fecha de publicación: 3 de marzo de 2020.
Precio: 15,15€
ISBN: 978-8499987910
Valoración: 🔮🔮🔮🔮🔮/5
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La novela coreana del momento, Almendra, es una historia sobre crecer, descubrirse a uno mismo y aceptar que la ayuda no siempre viene por donde la esperamos.
Yunjae tiene dieciséis años, está en la edad de las emociones desbordadas, el amor y la rabia. Pero las amígdalas de su cerebro son pequeñas, más pequeñas que una almendra y, como consecuencia, Yunjae es incapaz de sentir nada.
Educado por su madre y su abuela, aprende a identificar las emociones de los demás y a fingir estados de ánimo para no destacar en un mundo que pronto lo tachará de extraño. «Si tu interlocutor llora, tú entrecierra los ojos, baja la cabeza y dale una suave palmada en la espalda», le dice su madre. Así construye una aparente normalidad que se hace trizas el día en que un psicópata ataca a ambas mujeres en la calle. Desde entonces, Yunjae debe aprender a vivir solo, sin deseo de derramar una lágrima, sin tristeza ni miedo ni felicidad.
A Yunjae le tienden la mano personas improbables: un antiguo amigo de su madre, una chica capaz de romper certezas e incluso un abusón con más afinidad de la esperada. Los tres quebrarán la soledad del protagonista de Almendra.
Una novela breve y lacerante en la que solo la empatía puede llevar a la esperanza.
Últimamente me llama mucho la atención la literatura asiática, porque me han recomendado muchísimos libros del estilo; y este es uno de los que tenía muchas ganas de leer.
Es un libro con capítulos muy cortitos, lo que hizo que siguiera leyendo y leyendo sin parar. Además, la historia me ha parecido preciosa.
Una cosa curiosa es que, a pesar de no tener prácticamente diálogos, no se me ha hecho nada pesado de leer.
En esta novela conocemos a Yunjae, nuestro protagonista, que nos va contando su historia en primera persona.
Yunjae nació con las amígdalas del cerebro demasiado pequeñas, del tamaño de una almendra; y, por eso, no puede sentir nada. No siente alegría, ni miedo, ni tristeza... Eso hace que su vida sea muy complicada y que le cueste mucho relacionarse con los demás.
A lo largo de las páginas del libro nos presenta a diferentes personas que va conociendo a lo largo de su vida y que le ayudan a entender mejor las relaciones y los sentimientos.
Es un libro muy bonito, que nos enseña lo importante que es relacionarse con las demás personas, ponerse en el lugar de los demás, y valorar mucho los sentimientos que, para todos, son algo muy normal e infravalorado.
Me ha gustado muchísimo la forma de narrar de Won-Pyung Sohn, me encantaría leer más cosas de ella.
Os recomiendo leerlo, es una historia preciosa que os hará bien al corazoncito.
- Nisa.
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